SATURNO, UN VIERNES

Todo está listo, mi núcleo. Las luces, los gases, los polvos. No te preocupes de nada que la órbita que tengo preparada para hoy te va a encantar, pero apurémonos que esto rota muy rápido. Que el viento ecuatorial nos arrastre y despeinemos nuestras estructuras con hidrógeno y helio ¿no sientes el metano, mi núcleo? Estás tan poco densa hoy, me haces sentir como una cuña radial y tú, mi núcleo, eres la magnetosfera que marca mi velocidad. Perdámonos por el callejón de las tormentas y que nos dé una descarga. Nada son comparadas con lo que un solo ión tuyo puede hacerme sentir. Y crucemos el planeta para ver la nube hexagonal del polo norte, dejemos a todos atrás, lleguemos al vórtice mismo y sonriamos para las fotos de la sonda Cassini antes de perdernos en las corrientes de chorro. Ay, mi núcleo, me haces sentir que todo es posible, como los vientos de ambos hemisferios que ignorando el efecto estacional de la inclinación axial tienen una alta simetría. Y cuando te canses de esta hostil atmósfera iremos a los anillos.
Tengo un amigo allá que le va el oxígeno molecular ¿no estás cansada de tanto hidrógeno y helio? Dejemos este suelo y atravesemos una nube de cristales de amoníaco para subir más allá de la atmósfera superior y sus fenómenos fotoquímicos y sentir como la presión se reduce sobre esa formación que tienes y que me vuelve inestable. Lleguemos al mismísimo límite de Roche y pídeme lo que sea bajo las lunas de rotación sincronizada. Riámonos de Hiperión y su órbita caótica y caguémonos en todos los Voyager y los ingenieros que los parieron ¡¡¡jajaja!!! y que con sus cámaras envidien nuestra unión si es que son capaces de calcularla. Dejemos que el viento solar nos arrastre y cuando volvamos a casa, bajo esa presión de siempre, nos aglutinaremos como solo nosotros sabemos hacerlo. Tal vez haya sobrado algo de fosfina y la energía gravitatoria en forma de calor por la separación de fases entre el hidrógeno y el helio harán el resto. Me haces tan volátil. ¡Ay, mi núcleo, que viernes tan maravilloso!